13.10.10

Me cansé del perdón.
Me cansé de que duela ver ese nombre.
Me cansé de que duela y punto.
Puedo repetirme mil veces que no me lastimaron,
que no me lastimaste,
y aún así no lo haría verdad.
Puedo decirme cinco mil veces que yo no soy la culpable,
y aún eso no sería verdad.
Me gustaría decir que odio al pasado,
pero eso sí que sería mentir.
¿Para qué me sirve mentir a esta altura?
Censurenme.
Callenme.
Por Dios Santo, si quieren matenme.
Ya no me molesta nada.
Estoy más allá del bien, del mal...
Sin embargo parte de mi todavía se pregunta
qué pasó con los "te extraño",
con los "muero de ganas de verte",
con los "quiero besarte".
Hoy equis deja de ser x=y.
Me rehuso a darle ese poder a alguien que no lo quiere...
que no me quiere.
Si tanto te pesa hablarme, quererme...
entonces ya está.

Sí. Ya está.

12.10.10

Just because you were hurt doesn't mean you shouldn't bleed.

21.9.10

Entrada # 400.

¿Cómo darle final a una historia que viene siendo escrita desde hace años? ¿Cómo darle la espalda a alguien -o en este caso a "algo"- que fue tu mejor amigo en las buenas, en las malas y cuando nada tenía sentido? ¿Uso palabras ajenas, intento decir algo con las mías, o mejor sería el silencio? ¿Cito una canción, cito todas las canciones o hablo desde el corazón? Me parece que todo el tiempo que pasé en este blog amerita una combinación de las opciones mencionadas.
No hay explicación coherente de por qué abandono el blog -este blog-, pero creo que si la hubiese, significaría que es de alguien más y no mío, porque suelo perder el sentido con cosas así. Sea como sea, y por la razón que sea, lo dejo. Y no, no me voy para siempre (you wish!), sólo me mudo a uno diferente. ¿Por qué? Creo que es un intento de "borrón y cuenta nueva" sin realmente borrar lo que está escrito acá (porque soy una partidaria de que al pasado no hay que borrarlo, si no que hay que aprender a aprender de él y aceptarlo). Hay millones de recuerdos viejos y nuevos de cosas lindas, y hay millones de recuerdos feos y obscuros; a ninguno de estos pretendo borrarlos. Llegué a un punto en el que creo que es momento de crear nuevos recuerdos y que la vida me sorprenda. Y así, me retiro sin decir más cosas cursis y melosas, porque ya habrá tiempo para decirlas en el nuevo blog a todas.

Y ahora paso a usar palabras ajenas, que llegaron a mi de la mano de un chico que aparentemente conocí hace más años de los que recordaba, que resumen bastante bien lo que siento y eso con lo que vengo batallando desde hace días, semanas y hasta meses (por no llegar a decir años).

en esta noche en este mundo
las palabras del sueño de la infancia de la muerta
nunca es eso lo que uno quiere decir
la lengua natal castra
la lengua es un órgano de conocimiento
del fracaso de todo poema
castrado por su propia lengua
que es el órgano de la re-creación
del re-conocimiento
pero no el de la re-surrección
de algo a modo de negación
de mi horizonte de maldoror con su perro
y nada es promesa
entre lo decible
que equivale a mentir
(todo lo que se puede decir es mentira)
el resto es silencio
sólo que el silencio no existe

no
las palabras
no hacen el amor
hacen la ausencia
si digo agua ¿beberé?
si digo pan ¿comeré?
en esta noche en este mundo
extraordinario silencio el de esta noche
lo que pasa con el alma es que no se ve
lo que pasa con la mente es que no se ve
lo que pasa con el espíritu es que no se ve

¿de dónde viene esta conspiración de invisibilidades?
ninguna palabra es visible

Si a alguien le interesa, muevo mis delirios a http://culpoalaspeliculas.blogspot.com
Me despido de mi blog de años con una invitación a mi super fiesta que prometí por las 400 entradas. Si quieren, preguntenme qué onda, y si no...no sé :)

Quiero un paraíso entre este infierno.
Quiero un beso que de paz en medio de todo el caos de la ciudad.
Quiero palabras que borren el mundo.
Quiero una mezcla perfecta entre lo malo y lo bueno.
Quiero noches de películas en la cama, con abrazos y silencios que lo dicen todo,
y quiero perderme escenas por la compañia, esa compañia genuina, noches enteras.
Quiero tardes en plazas.
Quiero gritar cosas en silencio con los ojos.
Quiero que quieras mis conejitos blancos
y que entiendan a qué me refiero cuando hablo de ellos.
Quiero que tú imagen (y acá el pronombre no tiene imagen) se quede conmigo todo el día,
aún cuando estás lejos.
Quiero que calles, que grites, que digas, y que sientas que podes hacerlo conmigo.

20.9.10

La vida es tan RANDOM.
Hoy fue un día lleno de magia y cosas felices (y dinero derrochado).
Y no me olvido nunca más del flaco ese de la calle...
SUPER RANDOM
Con cuatro o cinco entradas restantes, hago un cambio drástico y traiciono a mi blog cuando llegue a las 400. Cambio de blog, con ideas nuevas, porque éste ya está lleno de cosas que mejor no recordar o por lo menos recordarlas como algo del pasado, sin traerlas al presente. Así, aviso, que ni bien cumpla 400 posteos le digo "bye bye" a Tales of Fake y me cambio a otro :)
Ahora me retiro porque tengo que ir a trabajar y estoy en un ciber, y lo hago diciendo algo que vengo pensando desde que salí de mi casa.

¡Te amoooo!
(aunque no lo vayas a leer nunca de los nuncases)

19.9.10

¿Cómo un sentimiento tan lindo puede estar implicado en un odio tan grande? ¿Cómo puede ser que tus palabras simplemente se desgasten de esa manera? No entiendo cómo funcionamos (nosotros, los humanos). Queremos algo. Morimos por algo. Cuando conseguimos ese algo, es sólo cuestión de tiempo para que esa pasión que solíamos tener y ese fuego que nos solía quemar se desgaste, se apague y se convierta en simplemente un dolor en el pecho, en el corazón, en todo nuestro cuerpo que nos arrastra y nos quema malos recuerdos en la retina cuando lo único que queremos hacer es no ver. Wow, ¿de dónde salió eso? Me duele. Sí, me duele. No lo voy a negar. Me harté de mentir. Sí, me destroza. El silencio me mata. Odio que todo lo que quiero se haga pedazos de manera tan simple. Lo único que puedo decir es que siento impotencia. ¿Hacia qué? Ya no tengo ni la menor idea. Quiero hacer algo, decir algo, gritar algo, pero ni las acciones ni las palabras importan a esta altura. Lo único que me destroza y que me revuelve el estómago es saber que no puedo hacer nada para detenerlo. Este dolor se fue de mis manos. Este dolor está en sus manos, no en las mías. Y a la vez, duele saber que nadie quiere hacer nada para detenerlo. Me merezco que quieran detenerlo. Lo sé. Sé lo que me merezco, sé lo que quiero y sé lo que necesito. Lamentablemente, esas tres cosas no siempre se juntan ni son las mismas. Yo sé que lo que quiero no es lo que merezco en este momento, y que lo que necesito es inalcanzable si tengo lo que quiero. Sin embargo, muero por ver ese cartel. Muero por retroceder el reloj una hora, un dia, un mes o incluso dos. Quiero re-hacer las cosas. ¡Sí! ¡Dije que quiero re-hacerlas! Quiero sacar a gente de mi vida que nunca debería haber entrado, y quiero dejar entrar a otra que empujé y aparté discriminando. Me duele todo. Los músculos de mi cuerpo se contraen y las lágrimas están muriendo de ganas de salir. Quiero llorar. Quiero gritar.
Birds flying high
You know how I feel
Sun in the sky
You know how I feel
Reeds driftin' on by
You know how I feel
It's a new dawn
It's a new day
It's a new life
For me
And I'm feeling good

Fish in the sea
You know how I feel
River running free
You know how I feel
Blossom in the tree
You know how I feel
It's a new dawn
It's a new day
It's a new life
For me
And I'm feeling good

Dragonfly out in the sun you know what I mean, don't you know
Butterflies all havin' fun you know what I mean
Sleep in peace when the day is done, that's what I mean
And this old world is a new world
And a bold world
For me
Fooor me

Stars when you shine
You know how I feel
Scent of the pine
You know how I feel
Yeah freedom is mine
And I know how I feel
It's a new dawn
It's a new day
It's a new life
hu
It's a new dawn
It's a new day
It's a new life
-Fue un día genial-
Quiero un paraíso en este infierno.
Fin de semana per-fec-to.
Lo cierro diciendo que este es el posteo 390.
Voy contando.
El fin de semana que viene hago fiesta por las 400
(porque la vida es joven y razones para festejar se encuentran así de fácil)
con quien quiera festejarlo.

17.9.10

¿Me saldrá alejarme del blog y del messenger hasta por lo menos el domingo? Yo digo que sí. Cualquier cosa, tengo mi celular por lo menos. Ah, y me quede hablando sola nuevamente -sí, ahora te hablo a vos-, así que confío en que leerás esto en algún momento. No tengo ningún número porque tengo otro telefóno (otro aparato, pero el mismo número), así que mandame mensaje si no cambias de opinion sobre mi invitación. A la otra gente: ustedes también pueden mandarme mensaje. Hasta la vista.

Nostalgia isn't what it used to be

Mañana va a ser todo un viaje.

16.9.10

Eran las siete de la mañana. El sol lentamente se asomaba entre las finas cortinas que cubrían la ventana, mientras que una sábana blanca cubría sus cuerpos desnudos. Lentamente, el mundo recobraba la vida que había perdido la noche anterior y el cielo se pintaba de colores. Los ruidos de los autos y las voces de los transeúntes de a poco se incorporaban a la escena, y el canto de los pájaros y la briza que gentilmente acariciaba sus cuerpos les daban la bienvenida.

Eran las cuatro de la tarde y las agujas del reloj se sentían como bolsas llenas de rocas que debía arrastrar, pegadas a su espalda. Las paredes verdes y amarillas, las pizarras levemente escritas y el claqueteo constante de los tacos de las “señoritas” caminando de un lado al otro por los pasillos, amenazaban con desterrarla de ese mundo que ella tanto amaba: su mundo. Las bolsas bajo sus ojos, el maquillaje ya levemente corrido y el dolor de cabeza eran simplemente recordatorios del ayer y de lo difícil que iba a ser el mañana.

Eran las ocho de la noche. Las calles estaban mojadas y la humedad atentaba contra su peinado, el cual había cuidadosamente arreglado horas atrás, pensando en él. Sus pies golpeaban, enojados, la vereda mientras caminaba hacia ese punto que ya conocía muy bien. De manera repentina, las luces blancas y los colores violetas arrasaron con su tranquilidad y los rostros de los extraños la hacían sentir incómoda. Mientras bajaba las escaleras, no podía evitar pensar en su sonrisa, en su aroma y en todo lo que él implicaba. Ella sabía que faltaban días para volver a encontrarse, pero su corazón ya palpitaba apurado con el simple pensamiento de sus labios presionados contra los de ella. De a poco, sus pasos comenzaron a ser más cortos, más apurados. Por alguna razón que no comprendía, sentía que debía apurarse y girar esa llave rápidamente. De nuevo el reloj. Ese reloj con luces rojas que todas las tardes marcaba los segundos faltantes para su condena. Esta vez ella estaba decidida a ganarle. Esta vez, esos cuatro números eran poderosas señales de la libertad que le esperaba hasta que volviese a ser esclava de la rutina al día siguiente.

Ya eran las nueve y media. El viento frío cortaba sus mejillas a medida que transitaba el camino hacia su casa. El mp3, confiable aliado, y la música ruidosa que tanto la caracterizaba le daban apoyo en un mundo en donde no había de dónde agarrarse. La realidad estaba empezando a ganarle. Así, de la nada, recordó su imagen y su corazón volvió a acelerarse. De repente comenzó a sentir ese propósito misterioso que le había hecho alegrarse tan sólo una hora atrás, y apuró el paso. Sus zapatillas degastadas maltrataban las veredas con los golpes abruptos y brutos que pegaban.

Eran las nueve cuarenta y cinco, y ahí estaba. Frente a su puerta, entusiasmada por una razón desconocida por ella, se limitó a observar la madera. Cerró los ojos, respiró y sintió la magia incorporarse a ella. Una vez que había girado la llave –tras hacer ese truco que sólo los familiares conocen: tirar un poquito la puerta para atrás, girar la llave y rápidamente tirar de la puerta hacia adelante, acercándola de uno- y estaba adentro, un océano de sensaciones se abalanzó sobre ella. No había palabras para describirlas ni sonidos que les hicieran justicia. Abrió los ojos de manera lenta y respiró una vez más la tranquilidad que le ofrecía el momento. Al abrirlos, sus ojos automáticamente se dirigieron hacia ahí. Sobre la mesa, en frente del sillón marrón y entre el florero y el teléfono rojo chillón, yacía un sobre color amarillo que simplemente tenía su letra escrita en el borde inferior derecho. Nuevamente, con el corazón palpitando y amenazando con salirse de su pecho, se abalanzó sobre el sobre y lo abrió como un niño abre los regalos en Navidad o en su cumpleaños. Adentro la esperaba un papel blanco como la nieve. “Cuando dudes, pensá en mí, en cuánto te amo y en la magia que creamos, y sonreí.” Nuevamente, comprobando que para ser superhéroe en el mundo moderno, no se necesitan disfraces o antifaces, si no gestos como estos, la había salvado.

Hoy almorcé con mi tía.
Hoy, me enteré que mi tía está en la mafia o algo así loco.
Hoy, sin razón, le compré un regalo a mi prima.
Hoy le pedí a un chico del trabajo que me diseñe un tatuaje.
Hoy, un señor malo en el subte me piso un dedo y me pateó fuerte.
Hoy, amenacé con quemarle el rancho a muchos de los que llamaron.
Hoy, compré una caja de Flynn Paff para compartir en el trabajo.
Hoy, fue divertido.
¿Saben qué?
Estoy segura de que mañana también lo va a ser.
"Al final del día, la fe es algo curioso. Llega cuando menos la esperas y te hace dar cuenta de que tus sueños no son los que esperabas y de que la gente ya conocías, siempre conserva la habilidad para dejarte sin palabras."

-Palabras robadas.
No quiero dormirme.
No quiero dormirme.
No quiero dormirme.
No quiero dormirme.
No quiero dormirme.
¿Saben qué sí quiero?
¡Quiero reirme!
Quiero sonreirme con esa sonrisa boba que me sale del alma, que nadie entiende.
Quiero cerrar los ojos y respirar la música.
Quiero sentir el cosquilleo de la magia recorriendo mi espalda.
Quiero sorprenderme.
Quiero que la vida me sorprenda con brillo en los ojos,
con pensamientos ilusos,
con sueños despiertos,
con gritos en silencio,
con horizontes que no marcan el fin de nada,
con nubes de algodón de azúcar
y conejitos blancos (tenía que decirlo).
Quiero estallar de la alegría.
Quiero movimientos espásticos que nadie más que yo calificaría como "baile".
Quiero mi película (porque algunos escriben novelas, y yo grabo películas).

¿Algo que no quieras?

Muchas cosas.

¿Algo más que Sí quieras?

Quiero besar a una persona,
y que esa persona me quiera besar a mí.

¿Se puede eso?

En mi película, sí.
Repito: que la vida me sorprenda.
No tengo apuro.
A veces la paz que uno busca está escondida tras el caos que implica una sonrisa.
I'm so glad you have a one-track mind like me.